miércoles, 4 de febrero de 2009

Gregarios



Corro


Corro como los demás
con las manos cerca de los frenos
la mayor parte del tiempo.

Corro entre todos ellos
y poco a poco vuelvo a percibir
los diminutos elementos que conforman esta vida.

Corro como nunca
porque hoy no ha habido tregua ni la habrá.

Aunque la fatiga es grande
al final, todo se decidirá por unos segundos.

Aunque devoramos kilómetros y kilómetros
todo se decidirá por unos milímetros.

Aunque en unas pocos horas
atravesaremos medio país,
aquí no hay sitio ni para respirar.

Los codos del francés
se han acomodado en mis riñones
hace bastante rato

pero el dolor insoportable
es el de la rodilla

un cincél preciso descargándose vuelta a vuelta
sobre el hueso y los ligamentos

Corro y mastico ritmicamente
la glucosa me hace ponerme de pie sobre los pedales
escoger nuevos compañeros de viaje
hacer una broma.

He visto la señal desde el coche
yo sé lo que eso significa.

Corro mientras me junto en cabeza
con los del equipo
las manos aferradas a la parte baja del manillar

corro contra el viento opresor
llevo a rueda un corazón angustiado y sin aliento

corro con todas mis fuerzas
y se descuelga el dolor.
.
.

2 comentarios:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ICEMAN dijo...

muy bonito estas muy poeta ultimamente ¿ que te pasaaaaaaaaaaaaaa?